Rosquilletas


Ingredientes:

100 ml de aceite de girasol o de oliva
100 ml de cerveza
1 c/p de sal
1 c/c de bicarbonato
Harina, la que admita (depende de la harina pero aproximadamente 300 g)
Semillas variadas
Especias: orégano, curry, pimentón dulce (opcionales y a elección)


Preparación:

Para elaborar la masa, vamos a calentar un poco el aceite en el microondas. Mezclamos los ingredientes líquidos y añadimos la harina, la sal y el bicarbonato, a la vez que vamos removiendo con una cuchara de palo. En este punto añadimos las especias y semillas que más nos gusten y las repartimos bien por toda la masa.

Una vez la masa se despega de las paredes del bol, ya la podremos amasar sin que se pegue a las manos. Trabajamos la masa estirando y encogiendo y dándole unos golpes contra la encimera. Esto permite que cuando la extendamos, no se acurruque.


Una vez la hemos trabajado, veremos que es una masa muy elástica que permite múltiples formas. Así, podremos darles la forma que queramos. Si preferimos en forma de bastoncillos, cogemos una porción de masa y entre las palmas de ambas manos vamos girando la masa haciendo un rulo y la dejamos caer sobre su propio peso, de manera que se estirarán. Si las queremos planas, podemos extender la masa entre dos papeles de horno con un rodillo hasta dejarla de aproximadamente medio centímetro y luego, haremos tiras con un cortapastas o cortapizza. Si las queremos en forma de panes, cogemos una porción de masa, hacemos un rulo con ambas manos sobre la encimera, aplastando a la vez y le damos la forma típica ovalada con los extremos en punta y más gordita por el centro.

De cualquier manera que las hagamos, las pondremos sobre un papel encima de la bandeja del horno. Tenemos que evitar hornear rosquilletas de diferentes formas, porque dependiendo de cómo sean, variará el tiempo de horneado. No hace falta separarlas demasiado ya que no crecen como para que se peguen entre ellas.

Precalentamos el horno a 180º y las tenemos en la posición intermedia alrededor de 30 minutos o hasta que veamos que se doran. Podemos probar una y añadir más tiempo o sacarlas.

Las dejamos enfriar sobre una rejilla o sobre la encimera de la cocina. Aguantan crujientes unos días en una caja metálica bien cerrada o un bote de cristal hermético, aunque el tiempo dependerá también de la humedad en el ambiente.



Música: Another sunny day, de Belle and Sebastian









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