Cheescake de calabaza

Ingredientes para un molde de 18 centímetros:

 

Para la base:

 

75g galletas tipo lotus

45g mantequilla fundida

 

Para el relleno: 

135 g de nata para montar

200 g de calabaza asada

250 g de queso crema

50 g de azúcar moreno

2 huevos

1 c/c de canela

½ c/c de jengibre

½ c/c de nuez moscada

 

Preparación:

Empezamos haciendo la base de la tarta. Para ello picamos en una batidora de vaso las galletas. Fundimos al microondas la mantequilla. Forramos el molde que vamos a usar con papel de horno, previamente humedecida la parte del papel que estará en contacto con el molde y lo arrugamos. Una vez adaptado al molde, vertemos las galletas trituradas y la mantequilla y acoplamos esta mezcla a la base. No son muchas galletas, así que quedará una base delgada.

En el mismo vaso que hemos usado para triturar las galletas, añadimos todos los ingredientes y batimos. Quedará una crema fina y homogénea. Vertemos la crema sobre la base de galletas.

Pre calentamos el horno a 195 grados. Al meter la tarta en el horno en la posición 3 o intermedia, bajamos la temperatura a 190 grados y la tendremos a esa temperatura constante durante 40 minutos. Pasado este tiempo la sacamos. Veremos que al moverla, la tarta está muy fluida por el centro. Es así como tiene que estar. Una vez fría, coge cuerpo y ya no tiembla 

Las tartas de queso ganan mucho con el reposo en frío, así que cuantas más horas podamos aguantar mejor estará. A las seis horas ya la pudimos comer pero al día siguiente estaba más buena todavía.

Notas:

 

Es una tarta poco dulce debido al poco azúcar que lleva pero se compensa totalmente con el tipo de galletas de la base, que son azucaradas y con gusto a caramelo.

Puedes usar el típico queso philadelphia u otro tipo cottage, que también queda muy bien.

En cuanto a las especias, puedes usarlas todas o las que prefieras, en la cantidad a tu gusto. 

Es muy importante que la calabaza la aséis en el horno previamente, sin nada de líquido y nada de azúcar. Se nota muchísimo la diferencia entre incorporarla asada que ponerla hervida o al microondas. También es la manera más eficaz de que no absorba agua y se cueza en sus propios azúcares.

 

 

Música: Back to black, de Amy Winehouse